Conectar
Conectar con el sentimiento.
Descargar a través del cuerpo.
Respirar nuevos aires.
Recargar energía.
Transmitir buena vibra.
Construir sobre lo que suma.
Dejarse llevar por lo lindo.
Disfrutar el placer.
No dejarse vencer
por el miedo, la culpa,
el deber o “pertenecer”.
Avanzar paso a paso.
Abrirnos camino
y aprender mientras seguimos.
Evolucionar como almas,
que a eso vinimos.
Aflojar tensiones, bajar barreras,
que esto no es una carrera.
Deshacerse de los juicios,
abrazar la transformación,
y dejarnos llenar de ilusión.
Soltar y confiar,
que siempre hay cosas buenas por llegar.
Escucharnos y responsabilizarnos,
de lo que somos, buscamos y amamos.
Y decidir con placer,
todo eso que queremos ser.
El “poder” está en el camino que tomamos,
el lente con el que observamos
y con el que nuestra realidad creamos.
Qué grande es el universo,
qué sabia es la naturaleza,
qué mágica es la vida
y las personas que se nos convidan
y toda su energía
que nos es compartida.
Chispazos de amor, de conexión,
de reflexión, e introspección,
que prenden fuego el corazón.
Se ilumina el pecho, se llena de emoción.
Y la razón se queda sin explicación.
Las palabras fluyen, el camino sigue.
No queda más que dejarnos sorprender
por lo que el destino tenga a nuestra merced.